Itzy m&m

Raro

Hoy no lo supero, hoy no lo soporto, hoy no lo creo... Te extraño tanto amigo... hoy más que nunca te extraño, como nunca, como siempre, como toda la vida, en la otra vida. Te quiero, te quiero. Es raro, tan raro, tan sutil y tan dolorosamente raro. Es mentira, es sueño, ¿a dónde fuiste? No tardes. Descansa mucho y ríe y se feliz. Te quiero

Hugui

Hola amigo mío, no sé ni como empezar, me siento muy rara, hoy en la mañana cuando iba hacia el trabajo pensaba que todo era igual: yo parada en el mismo lugar, los coches pasando, las mismas personas que veo todos los días, con la única diferencia que tú ya no estabas. De verdad es una sensación muy extraña la que siento, a ratos muy triste, con ganas de llorar otra vez, y en otros momentos me acuerdo de los momentos vivídos y me río mucho. Todavía no lo creo, en la mañana también tenía la esperanza de que todo esto no fuera verdad. Es muy raro malditi simi, te voy a extrañar mucho por todo lo que tú ya sabes, porque te quiero, y porque sé todo lo que tú me querías a mí. Ayer en tu funeral, dentro de mi contexto filosófico-cursí pensaba: "aquí estoy amigo, hasta el final". Primer amigo iberesco, simio, los golpes por siempre simiesca persona, simio bastardo, como tú me decías. Siempre "presumí" de mis mejores amigos: los malditos simios, Hugo, Juan y María. Y ahora tú te has ido, morsa arruinada con grillos. TE QUIERO POR SIEMPRE AMIGO MIO

Olor (onairevaj)

Hoy lo ví, hoy sentí su presencia otra vez detrás de mí, y otra vez sucedió como si lo presintiera, como si lo llamara con cada pensamiento, con cada latido, habitándolo.

Su olor llegó hasta mis sentidos y en cuestión de segundos (10 para ser exactos) los penetró uno a uno, mucho antes que sus manos alcanzaran a tocarme y ahí se quedó; dejo impregnado el lugar con ese aroma que percibo hasta dormida, con sus pasos, con nuestro pseudoromance. Lo respiré, lo toqué, y él me miró como si de verdad le inspirara algo... algo más que piel.

Desde que lo olí y lo probé ya no soy sólida, me derrito como si fuése mercurio ante el sol.

Me encantaría olerlo otra vez tan de cerca como ya mi cuerpo y olfato recuerdan de anteriores noches, y beberlo con gotero, despacio, muy despacio para que no se termine.

Encuentro Cercano

Ahí estaba, puntual, a las 8:30 p.m. Todo estaba listo para llevar a cabo el ritual "para no parar", dijo él.
Las velas, el coco, la miel, ellos, yo y mi blusa blanca y el corazón que se me salía del cuerpo. Primero: los rezos, los nombres, el ruego. Después: la sangre, el miedo transformado en fe, el corazón otra vez en su lugar y el coco con melao penetrando en mi cabeza, traspasando mis pensamientos, ablandando mi dolor...

Experiencia mística, única, un encuentro cercano con la fuerza más grande de Cuba...

Again

Otra vez. Otra vez llegó, jaló su mano y susurró palabras al compás, siempre a compás, porque entre ellos todo es melodía, a veces a contra, a destiempo, sincopada, otras extremadamente lineal, sincronizada, pero siempre intensa, siempre con montuno.
Extraño, extrañamente volvió (volvieron) como todo lo suyo, sin explicación, por generación espontánea, algo que brota de quien sabe donde, tal vez desde las raíces de esa pista, donde brotaron por primera vez.

Un baile

Un día, una hora, las luces, el vestuario, la música, hacer arte tacón tras tacón; diálogo abierto con el cuerpo. Hacer de la cotidianidad un bello signo, una bella figura para mostrar, para mostarle al mundo que se puede creer en el ser humano, en su fuerza, en su magia... Un baile, un baile fue suficiente para materializar el interior de una mujer, y de muchas.